La creciente transformación del sector inmobiliario tiene al avance de las nuevas tecnologías entre sus principales motores y diferenciales. El nuevo paradigma se centra en brindar mejores experiencias a los clientes y procesos más transparentes. En ese sentido, el mercado local suma tecnologías PropTech (Property Technology) y, dentro de ese universo, consolida el Crowdfunding o Financiamiento Colectivo, en sintonía con lo que ocurre en los países más vanguardistas.
¿Qué es el crowdfunding inmobiliario y cómo funciona?
Definido como la financiación participativa de pequeños inversores –muchas personas aportan pequeños montos para desarrollar proyectos de viviendas–, el crowdfunding inmobiliario representa una verdadera oportunidad de acceder a proyectos que de otra forma estarían vedados para la mayoría de los ciudadanos. Se trata de uno de los segmentos fintech con mayor dinamismo.
Con el objetivo de comprar una propiedad o de financiar proyectos de un desarrollador inmobiliario, a través de esta modalidad, un grupo de inversores aúnan sus recursos financieros y obtienen una rentabilidad en determinado tiempo. De esa manera, personas que no poseen grandes sumas de dinero pueden, con bajos montos de entrada, invertir en proyectos de primer nivel.
Además de volver más accesible la compra de inmuebles, el crowdfunding inmobiliario permite realizar inversiones tanto a nivel local como en el extranjero de manera parcial o totalmente online, con los mayores estándares de seguridad y transparencia. Asimismo, en las distintas opciones que existen en la Argentina, las personas acceden a inversiones en pesos con rentabilidades en dólares.
Algunos ejemplos locales
En nuestro país aparecen diversos ejemplos, como Crowdium, Joinver, Crowdi, Investate, Invesafe, Sumar Inversión y Simplestate, entre otras. Operativa desde 2015, Crowdium fue la primera plataforma de crowdfunding inmobiliario de nuestro país. En 2018 la siguió Sumar Inversión y, un año después, se sumó la startup Simplestate (que en 2022 selló una alianza con Mercado Libre).
A partir de una plataforma digital 100% automatizada, Crowdium (que, al igual que Simplestate, forma parte de la Cámara Argentina Fintech) permite invertir en propiedades de forma simple, segura y rentable. La empresa realiza un análisis exhaustivo entre cientos de proyectos en toda Latinoamérica a fin de acercarle a sus clientes las mejores alternativas de inversión. Gracias al aporte de miles de inversores se adquieren propiedades de primer nivel, y cada inversor resulta dueño de una participación según su inversión. Finalizado el proyecto, se venden los activos, se distribuye el capital más los potenciales retornos generados por la renta y/o revalorización a todos sus inversores.
En tanto, Sumar Inversión es una plataforma digital que tiene como objetivo “acercar a los inversores o ahorristas productos innovadores en diversos proyectos arquitectónicos, con la visión de hacerlo accesible desde cualquier parte, a cualquier persona”. Tal como indican desde Sumar Inversión, el fideicomiso es el formato legal adoptado para recaudar los fondos de los inversores o ahorristas: esa figura legal protege a todos los participantes y sus inversiones hasta la finalización de cada proyecto.
Como ocurre en la mayoría de los proyectos, la rentabilidad de Joinver siempre se cobra en dólares. “El primer paso es la compra con fondos propios de las propiedades luego permitiendo que el comprador participe con un porcentaje. Una vez que Joinver recupera el capital propio invertido, sale a buscar nuevas oportunidades en el mercado para más tarde compartirlas con sus clientes”, afirman.
Desde Investate, por su parte, promueven que “cualquier persona interesada en capitalizar sus excedentes de dinero, sin importar su volumen inicial, participe en el emocionante mundo de los desarrollos inmobiliarios, ganando dinero con ello”. El modelo de negocio se basa en el crowdfunding orientado a desarrollos, inversiones inmobiliarias y servicios relacionados.
Oportunidades en expansión que además de volver más accesible la compra de inmuebles, permiten realizar inversiones tanto a nivel local como en el extranjero de manera parcial o totalmente online, con los mayores estándares de seguridad y transparencia. De hecho, tal como se advierte en el último informe Finnovista Fintech Radar Argentina, “el ecosistema fintech mantiene su ritmo de crecimiento en número de empresas fintech locales hasta situarse en las 383 y sofistica su oferta de productos para satisfacer a un consumidor cada vez más exigente”.