Ubicado a la vanguardia en materia de real estate, Estados Unidos cuenta con la organización inmobiliaria más grande del mundo: la National Association of Realtor (NAR) o Asociación de Corredores en Bienes Raíces posee más de 1,4 millones de asociados. El concepto subyacente en el mercado es que se trata de un negocio de personas y no de propiedades.
Desde la Cámara Argentina de Empresas de Servicios Inmobiliarios (CAMESI) creemos que ese debería ser el norte del sector en la Argentina. Por eso trabajamos desde hace años en la divulgación de las buenas prácticas que se implementan en ese país. Replicar los aciertos del mercado estadounidense implica posicionar al sector como uno de los más dinámicos e importantes de la economía, así como un foco de atracción para la inversión inmobiliaria extranjera.
Hay 4 características que hacen de Estados Unidos un modelo a seguir:
Innovación tecnológica
Entre las herramientas más potentes está el Multiple Listing Service (MLS), un sistema que permite a las inmobiliarias y su personal compartir información. Se trata de una base de datos en la que aparecen todas las propiedades en oferta en un área determinada. Eso aporta un factor fundamental que es la agilidad.
El servicio se perfecciona constantemente con los avances de la Inteligencia Artificial, que mejora el proceso de búsqueda y análisis de propiedades, remodela la forma en que los inversores evalúan las inversiones potenciales, mejora la experiencia del cliente y agiliza la detección de fraude en las transacciones inmobiliarias.
Las tecnologías PropTech (realidad virtual, domótica, internet de las cosas, administración de propiedades, macrodatos, etc) forman parte de todos los procesos, desde el desarrollo de la marca personal del corredor inmobiliario, pasando por la sistematización de procesos, que deviene en tiempo optimizado para estar más cerca del cliente. En ese sentido, la tecnología aporta información de calidad para la toma de decisiones y también simplifica procesos decisorios que facilitan la vida del consumidor.
Transparencia
En Estados Unidos, resolver más eficazmente la necesidad del cliente está directamente relacionado con contar con información centralizada. Compartir información de forma cooperativa y unificada aporta claridad a los diversos actores del sector. En el país del norte, compradores y vendedores tienen acceso a datos confiables sobre precios, historiales de propiedades y comparaciones de mercado.
Basada en datos homogéneos y disponibles de manera online, esa transparencia resulta clave para que los consumidores puedan tomar mejores decisiones en la compra y venta de inmuebles. Además, el sector inmobiliario en el país del norte está altamente regulado, lo que garantiza la transparencia en las transacciones y protege los derechos de los compradores y vendedores.
Trabajo en red
Lejos de atomizar la información disponible, el MLS permite la cooperación entre los profesionales inmobiliarios, así como la multiplicación de oportunidades. Asimismo, a partir de ese enfoque, incluso los competidores cooperan entre sí para garantizar transacciones exitosas. Los sistemas MLS equiparan las condiciones y posibilidades de pequeños corredores y las grandes firmas.
El valor agregado que encarnan las nuevas tecnologías y la transparencia es maximizado en Estados Unidos gracias al trabajo colaborativo. Esa es la única forma de deleitar a los clientes y de ser resilientes a la hora de crear nuevas oportunidades de negocio. El trabajo en red prioriza las relaciones humanas, así como la ética profesional y la formación y la capacitación constantes.
Servicios de calidad
Ofrecer experiencias memorables y sin fricciones está entre las prioridades de los protagonistas del sector en Estados Unidos. De la mano de los agentes inmobiliarios y del aporte que brindan las nuevas tecnologías, los clientes acceden a procesos más confiables y seguros.
Los consumidores consiguen ser deleitados: sus expectativas son resueltas de forma ágil y cercana. La profesionalización de todos los involucrados en el proceso –que adhieren a los estándares más exigentes de calidad y honestidad profesional– supone una garantía para los clientes.
Los miembros de CAMESI consideramos que crear una cultura de transparencia mediante la regulación y el acceso público a datos inmobiliarios beneficiaría al sector en la Argentina, mejorando la confianza de los consumidores e inversores. Sabemos que es clave brindar una gran experiencia al usuario en cada transacción inmobiliaria y que ese objetivo debe estructurarse alrededor de una infraestructura tecnológica robusta.
